Construimos futuros financieros con claridad y confianza
Desde 2018, ayudamos a personas y familias a entender sus finanzas sin complicaciones innecesarias. Creemos que la planificación financiera debería ser accesible, honesta y adaptada a cada situación personal.
La educación financiera como punto de partida
No vendemos sueños imposibles. Durante años, hemos visto cómo la gente se siente perdida frente a términos como "diversificación" o "planes de pensiones". Nuestro trabajo consiste en traducir esa complejidad a lenguaje cotidiano.
En 2023 decidimos cambiar nuestra metodología completamente. En lugar de ofrecer asesoramiento genérico, empezamos a crear recursos educativos que cada persona pudiera explorar a su ritmo. Los resultados han sido mejores de lo esperado.
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Transparencia absoluta en costes y servicios sin letra pequeña engañosa
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Formación continua para entender las finanzas personales con autonomía
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Adaptación a cada circunstancia sin soluciones prefabricadas
Las personas detrás de serafoilena
Un equipo reducido pero comprometido con hacer las finanzas más comprensibles para todos.
Irene Montserrat
Directora de Contenidos
Lleva más de doce años convirtiendo conceptos complicados en explicaciones que cualquiera puede entender. Antes trabajaba en banca tradicional, pero se cansó de vender productos que nadie necesitaba realmente.
Damián Soriano
Coordinador pedagógico
Diseña los programas formativos pensando en personas que nunca han tocado una hoja de cálculo. Su filosofía es simple: si necesitas un máster para entender algo, está mal explicado.
Nuestro compromiso con cada persona
Trabajamos principalmente con gente que tiene entre 30 y 55 años, personas que se dan cuenta de que necesitan ordenar sus finanzas pero no saben por dónde empezar. Muchas veces llegan después de haber probado aplicaciones complicadas o después de escuchar consejos contradictorios.
Lo que ofrecemos no son soluciones mágicas. Es acompañamiento práctico durante el proceso de aprender a tomar decisiones financieras informadas. Algunos tardan tres meses en sentirse cómodos, otros necesitan un año completo. No hay prisa.
La mejor decisión financiera que puedes tomar es entender realmente qué estás haciendo con tu dinero. Todo lo demás viene después.
